Es un bioinsecticida orgánico para el control de más de 200 especies de insectos plaga, controla especies importantes destacando: la mosca pinta del césped y la caña de azúcar, gallina ciega, barrenador de caña de azúcar, termitas, langosta, diferentes especies de grillos y escarabajos, entre ellos el picudo del chile, agave y del algodón. En el sector forestal controla la broca del cedro rojo, caoba y descortezadores. Es un insecticida biológico de acción sistemática que, al germinar, el hongo penetra al interior del insecto hospedante colonizando con micelio, la cavidad hemo linfática y sus sistemas vitales. La cutícula del insecto es penetrada con ayuda de enzimas secretadas en el ápice de las hifas. La secreción de enzimas lipasas, proteasas y quitinasas facilitan la muerte por intoxicación con varios tipos de sustancias producidas por el hongo. Los síntomas de la enfermedad son: pérdida de apetito, seguida de una desorientación, debilidad y decremento de la sensibilidad y muerte. El cadáver del insecto adquiere un aspecto momificado.